El viernes pasado, cuando pretendían realizar un nuevo feriazo en la Plaza Constitución, la Policía de la Ciudad no los dejó descargar su mercadería y comenzó a dispararles balas de goma y arrojarles gases lacrimógenos. Además les decomisaron los cajones de verdura en camionetas del gobierno porteño.
Los productores rurales del conurbano bonaerense realizaron varios feriazos y verdurazos como forma de protesta para visibilizar la crisis del sector y demostrar que la cadena de intermediarios vende la producción a un precio varias veces superior al que les pagan a ellos.
Durante el transcurso del pasado 2018, esta modalidad convocó multitudes en Plaza de Mayo, Once, Constitución y diversas plazas céntricas. Sin embargo, desde enero el gobierno de la ciudad de Buenos Aires le niega a la UTT los permisos que suelen solicitarse para concretar una actividad de ese tipo. La explicación que les dieron es que “ensucian la plaza”.
Nahuel Levaggi, referente de los trabajadores rurales señaló: “Seguiremos con los feriazos porque tenemos derecho a trabajar y alimentarnos libremente. Demostramos que somos los que producimos alimentos para el pueblo, que estamos en crisis y que somos invisibles para las políticas nacionales; pero también que hay miles de familias que no pueden pagar los alimentos que ofrecen los canales convencionales.”
Asimismo, Levaggi enfatizó: «Nosotros venimos hace varias semanas tratando de entablar canales de diálogo con la Ciudad para seguir con el feriazo. Hoy el gobierno respondió con represión y nos robó la mercadería. Les robaron el trabajo a los pequeños productores».
