Se realizo en la Plaza Aristóbulo del Valle.
Gran cantidad de personas desfilaron por ese paseo público, donde se instalaron numerosos stands desde los que distintos y simultáneos estímulos provocaban interesantes mixturas de sensaciones. Así, apetitosas vaharadas ascendían desde los puestos de comunidades nacionales y provinciales que ofrecían platos típicos y otros comestibles y bebidas, mientras en muchos otros quioscos se ofrecían en profusión las mercancías acostumbradas en este tipo de ferias, y, por otra parte, por el escenario montado en el centro de la plaza, desfilaba una larga serie de conjuntos vocales, instrumentales y coreográficos.
Este espacio de intercambio cultural y social se desarrolló este creceinte evento, donde las instituciones sin fines de lucro que prestan servicios a la comunidad estuvieron representadas a través de un stand, para difundir sus actividades y además 380 artesanos, integrantes de nuestra comunidad exhibieron sus producciones más diversas y creativas sus costumbres, sus artesanías, su música, su gastronomía regional y expresiones artísticas. En general, la gastronomía popular es una forma de la cultura, y la mezcla de la gastronomía y la música, una combinación invalorable”
El domingo en el cierre se realizó el desfile de banderas de los distintos países y provincias que participaron del Evento y se distinguió a personalidades que trabajan en el campo de la cultura. Estuvieron presentes el director general de Promoción Cultural Lic. Guillermo González Heredia, el director de programación y eventos de la Comuna 11 Carlos Raimundi, gestor del Encuentro Multiparticipativo y los Comuneros Graciela Valdez y Alejandra Viviani.
González Heredia dirigió unas breves palabras en las que valoró la masiva presencia del gente pese al frio, y exhorto a que los ciudadanos de la Ciudad Buenos Aires a vivir un poco mejor y ganar el espacio público y que la cultura sea el transformador social que todos necesitamos. También se refirió a los jóvenes que pasan por el programa cultural en barrios y que espera que sea un despertar de vocaciones. Finalizo destacando que los jóvenes puedan ser parte oferta cultural en el marco una ciudad que es la capital latinoamericana de la cultura. ‘Lo importante es incentivar a los trabajadores que hacen bien las cosas y la intención es aportar nuestro granito de arena para poder vivir mejor en esta ciudad’
