UNA HISTORIA DE BARRIO EN DEVOTO.  ¿HAY UN CAMBIO DE PARADIGMA POLÍTICO?

Cuento una historia brevemente porque la mayor parte de Uds. La conocen:  en las manzanas adyacentes a la estación de Devoto del Ferrocarril San Martin sobre la placita de los recuerdos en un área delimitada por Beiro, Navarro, Gualeguay y la vía, en los meses de diciembre del 2011, enero y febrero de este año se produjeron mas de 11 robos  con las mismas características: los delincuentes entraban por los fondos y forzaban alguna puerta o ventana se llevaban cosas de valor relativamente pequeñas y desaparecían siempre por los fondos.  Hay varias obras en construcción o por construirse que facilitaban la acción.  Algunos vecinos hicimos las correspondientes denuncias y hablamos con los (pues se sucedieron varios) comisarios de la 45.  La respuesta fue siempre estén alerta Uds.  Tomen sus teléfonos avísennos cuando vean algo sospechoso pero comuníquense entre Uds.  Así poco a poco fuimos conociéndonos los vecinos, cambiando ideas, números de teléfonos y direcciones de correo electrónico y se fue creando una red que además se reúne en un lugar público cada 20 días aproximadamente para tomar noticias de cuáles son los problemas y como se está actuando.  El problema de fondo es la inseguridad pero hay muchas maneras de combatirlo: mas iluminación (los vecinos decidimos mantener encendidas las luces de los fondos) pedir mejor iluminación a la ciudad, pedir que se poden los arboles que impiden las luces,  construir y pegar en los frentes de la casa un cartel que habla de la red vecinal funcionando para actualizar a posibles beneficiarios y ladrones que estamos atentos, se convocaron autoridades municipales que acudieron y por ejemplo desalojaron a los abusivos que acampaban en la placita Rofo. Los dos diarios locales nos ayudaron con artículos, noticias y presencia.  Hasta que el sábado 30 apareció una nota de una página en Clarín diciendo que hay 50 familias en Devoto que se han organizado contra el crimen. Los medios que son autorreferentes inmediatamente enviaron un cronista de Canal 26 y otro de canal 3 para hacer servicios sobre el fenómeno de la red social.

La red funciona, tiene capacidad de convocatoria, han disminuido notablemente los robos y obviamente aparecen otros temas que nos atañen y que tratamos de afrontar como es la invasión de construcciones de edificios que – amparándose en una incomprensible normativa edilicia –  permite a los inversores comprar terrenos y edificar los edificios mas altos posibles, algunos de 14 metros otros de 25,  siendo un pingüe negocio para los inversores que ofrecen departamentos con vistas a jardines y espacios arbolados que siempre fueron característicos de Devoto.[1]

Porqué surgió la red y porque sigue funcionando es una pregunta compleja que puede responderse de una forma simplista pero no del todo absurda:  es porque las autoridades nacionales, del gobierno local y comunales no han podido prevenir o responder a la demanda primigenia de seguridad, incluyendo la policía federal y la de la ciudad de Buenos Aires que en verdad no hemos vista activa en Devoto.

Visto en esta óptica simplista puede decirse que los vecinos no se sienten suficientemente resguardados ni representados y por ello actúan de forma directa ocupándose de acciones de la gobernanza que tal vez competieran a las autoridades antes mencionadas.

Lo interesante del tema es que siendo una historia pequeña y local se la puede universalizar: hay una crisis de representatividad política mundial, los ciudadanos no se sienten representados y actúan acciones de democracia semidirecta o directa.

El presupuesto participativo fue una de las primeras medidas de democracia directa o participativa La primera experiencia de presupuesto participativo (orçamento participativo) se inició en 1989 en la ciudad de Porto Alegre (Rio Grande do Sul, Brasil), tras la victoria del Partido dos Trabalhadores en las elecciones municipales. En un contexto de fuertes desigualdades sociales y recursos limitados, el nuevo gobierno no podía hacer frente a todas las necesidades de la población ni dar respuesta a las expectativas creadas entre la población más desfavorecida. Resultaba imprescindible establecer prioridades de acción y, para hacerlo, contó con la sociedad civil fuertemente organizada, dando voz a los movimientos sociales. A través de un sistema asambleario, se creó una estructura que permitiese a los ciudadanos incidir en las decisiones sobre el gasto .  La experiencia se extendió a otros países y hoy lo intenta Rosario http://www.rosario.gov.ar/sitio/informacion_municipal/pp.jsp  e inclusive hay una red de presupuesto participativo en todo el país http://www.rapp.gov.ar/.

Pero hay mas,  Islandia, mediante un referéndum popular  (94% por el no) rechazo una ley que aceptaba un préstamo del FMI para solventar las deudas hacia bancos ingleses y holandeses, cayó el gobierno, se está reformando la constitución por una comisión de 25 ciudadanos – entre 830 – que se presentaron sin ninguna pertenencia a partidos políticos ni propiedad particular.  El país está creciendo al 1,7 % anual es decir por encima del promedio europeo.

No quisiera que se sacaran conclusiones apresuradas de una simple universalización de una historia devotense.  Las que podemos sacar sin equivocarnos son una falta de confianza y representatividad de los partidos político (ejes del sistema republicano representativo)  una búsqueda por parte de la sociedad civil de nuevas formas de gobierno mas directas  y participativas.  Estamos seguros que el sistema representativo  centrados en los partidos políticos está fracasando que dos de los tres podres constitucionales están perdiendo vigencia (el legislativo y el judicial)  y que los medios de comunicación (el cuarto poder)  están agrandando su órbita de influencia pero todavía no tenemos ningún instrumento de gobierno (gobernanza) que los sustituya.  Las redes vecinales son una tentativa de suplir el vacio operativo de las instituciones no más representativas.

Antonio Martino

Profesor emerito de Ciencia política Universidad de Pisa

 

[1]Sobre este tema escribí un artículo Los edificios nos están cercando al que me remito

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